Alojamiento en casa del pueblo, habitación con baño privado, acceso a partes comunes y cocina equipada. Terraza con vistas espectaculares al puente antiguo. Ambiente auténtico y detalles preciosos en la casa. Habitaciones limpias y cómodas. Pueblo tranquilo con gente amable. Caminos para hacer caminatas y cerca de sitios característicos.

Casa Victoria ofrece alojamiento en una casa de pueblo con habitaciones limpias y vistas espectaculares desde la terraza. La cocina está bien equipada y los baños son cómodos. Los propietarios son amables y nos mostraron los lugares interesantes del lugar. Muy bien ubicado y cerca de sitios característicos de la zona.

Hermoso pueblo con gente amable. Vistas espectaculares desde la terraza. Cocina equipada y habitaciones limpias. Detalles auténticos en la casa antigua. Cama antigua de película. Experiencia única.

Vistas increíbles desde el apartamento. Gente amable y acogedora.3. Ubicación cerca de los lugares característicos.4. Oportunidad de probar vinos del Priorat y quesos.5. Caminos para hacer caminatas y zonas de baño cercanas.6. Cama muy cómoda.7. Dueños muy agradables y atentos.8. Casa con detalles auténticos y encanto.

Nada podría haber sido mejor.

Casa antigua y auténtica, cocina reformada, detalles preciosos, habitaciones limpias, vistas increíbles.

Nada podría haber sido mejor.

Casa antigua auténtica, vistas fantásticas desde la terraza, habitaciones limpias, cocina equipada, ambiente acogedor.

Para mí nada.

Las vistas desde la habitación espectacular

El silencio y la tranquilidad. Detalles preciosos en el resto del piso.Cama de hace 100 años

No me puedo quejar de nada.

las vistas desde la habitación son espectaculares, el silencio y la tranquilidad que ofrece la estancia fueron lo que más disfruté durante mi visita a La Vilella Baixa. Además, la casa antigua es encantadora, con una terraza con magníficas vistas y una cocina equipada para compartir. La ubicación también es perfecta para explorar los pueblos cercanos.

La cama no es muy cómoda.

La casa antigua super bonita. Terraza espectacular con vistas. Cocina bien equipada. Habitaciones limpias. Baños cómodos. Cama de película antigua. Encanto del pueblo.

Todo bien.

Mi estancia en Casa Victoria en La Vilella Baixa fue una experiencia maravillosa. El pueblo es tranquilo y la gente amable. Desde el apartamento disfruté de unas vistas increíbles y por la noche pude admirar las estrellas. Además, la ubicación es perfecta, ya que se encuentra cerca de los lugares más característicos de la zona, como el Priorat y el Montsant. pude probar deliciosos vinos y quesos. Otra ventaja fueron los numerosos caminos para hacer caminatas y encontrar zonas de baño en pantanos y ríos. En resumen, recomendaría este lugar sin dudarlo.

Aunque mi estancia fue genial, algo que podría mejorar es la oferta turística en cuanto a restaurantes. Al visitar en pleno agosto, fue difícil encontrar lugar, especialmente viajando con mi perro, ya que solo teníamos la opción de terraza.

Una estancia muy agradable en Casa Victoria Hostal. El pueblo es tranquilo y la gente es amable. Desde el apartamento se pueden disfrutar de unas vistas increíbles, especialmente por la noche con un cielo estrellado. Además, la ubicación del pueblo es ideal, ya que en solo 30/45 minutos se puede llegar a los lugares más característicos de la zona. es un excelente lugar para probar vinos del Priorat y disfrutar de los quesos locales. Y no podemos olvidar la gran cantidad de caminos para hacer caminatas de poca dificultad y encontrar zonas de baño en pantanos y ríos. La casa tiene un encanto auténtico, con detalles preciosos y habitaciones limpias. La cocina está bien equipada y los baños son cómodos. Sin duda, repetiremos esta maravillosa experiencia.

No me puedo quejar de nada 😃.

Nosotros buscábamos un lugar tranquilo y auténtico para alojarnos durante unos días y Casa Victoria cumplió todas nuestras expectativas. La casa del pueblo es encantadora y las habitaciones están limpias y cómodas. Disfrutamos especialmente de las vistas espectaculares desde la terraza, donde pudimos ver el atardecer sobre el puente antiguo. La cocina equipada fue muy práctica y nos permitió tener todo lo necesario para nuestra estancia. Además, la amabilidad de la gente del pueblo hizo que nos sintiéramos muy bienvenidos.

La casa antigua y auténtica. Vistas increíbles desde la terraza. Habitaciones limpias y cómodas. Cocina equipada y baños cómodos.

No me puedo quejar de nada.